El ciberataque al Ministerio de Trabajo obliga al Estado a aumentar la inversión
El pasado mes de junio, el Ministerio de Trabajo fue víctima de un ataque ransomware que causó graves problemas a sus actividades diarias. Un mes después, el Gobierno de España anunció una inversión superior a los 400.000 euros para mejorar la ciberseguridad del organismo. Dicha inversión fue destinada a la contratación de servicios profesionales externos, quienes se encargarían de paliar el ciberataque sufrido. Los contratos realizados fueron tres: Fujitsu Technology Solutions, Sidertia y Servicios Microinformática SA. Dos meses después, conocemos que la cifra inicial ha ido aumentando durante este tiempo, así como el número de contratos. De los tres iniciales hemos pasado a seis, lo cual ha aumentado el gasto hasta los 2.1 millones de euros. Y es que, por desgracia, los funcionarios del ministerio aún siguen encontrando problemas que entorpecen su actividad diaria. El ciberataque al Ministerio de Trabajo obliga al Estado a aumentar la inversión.
Han pasado tres meses desde el ciberataque sufrido por el Ministerio de Trabajo, pero aún colea. Esto pone de manifiesto que un ciberataque no es cosa de un día, y que sus efectos pueden prolongarse mucho en el tiempo. Más aún cuando los sistemas atacados apenas gozan de las medidas de protección recomendadas. Además, el ciberataque pertrechado afectó a algunas secciones del Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones. Secciones que estaban vinculadas informáticamente. Evidentemente, ante un ciberataque de esta magnitud, que afecta a servicios esenciales, poner cantidad a la inversión necesaria se antoja irrelevante. El alcance verdadero de los daños no se conoce hasta que se lleva a cabo un estudio pormenorizado de la situación. Por ende, es lógico que la cifra inicial haya aumentado hasta los 2.1 millones de euros mencionados. Hoy día, contar con la máxima protección en ciberseguridad es vital.