¿No somos capaces de crear mejores contraseñas que «123456»?

¿No somos capaces de crear mejores contraseñas que «123456»?

Un año más, y más de lo mismo. La inseguridad de las contraseñas es el cuento de nunca acabar… Seguimos incumpliendo todas las normas básicas para su creación y mantenimiento y a pesar de los repetidos intentos de concienciación cometemos los mismos errores año a año.

El especialista NordPass ha publicado su informe anual sobre el estado de la seguridad de las contraseñas. Ha sido confeccionado después de analizar más de 275 millones de contraseñas filtradas en los ataques producidos el último año. No hay semana que pase sin conocer alguna violación masiva de datos y con ello millones de contraseñas quedan expuestas.

La lista de las peores es lamentable y se repite año a año con viejas conocidas como «123456» (Primer puesto), «111111» (sexto) o «password» (cuarto puesto). Por descontado, son las que hay que evitar a toda costa ya que un pirata informático las puede obtener en menos de un segundo simplemente con un comando que pruebe las más utilizadas.

O usando ataques de fuerza bruta, palabras, combinaciones numéricas y otras a prueba sencillas de conseguir en poco tiempo. En este grupo se incluyen otras tan inseguras como «superman» (puesto 88) o «pokemon» (puesto 51). Hay de todo y en todos los campos, nombres como «daniel» (77) o «charlie» (96); «myspace1» (80) o «computer» (116); «soccer» (60) o «football» (73); «chocolate» (114) o «cookie» (puesto 126).

¿Increíble? Pues no. Seguimos igual. Y el problema es que las contraseñas son el método de autenticación preferente para acceder a los servicios de Internet o loguearse ante sistemas operativos, aplicaciones, juegos y todo tipo de máquinas, hasta que los sistemas biométricos estén completamente extendidos.